¿Qué es el matrimonio?
¿Una vida de unión de dos seres que se aman, o una cárcel?
Cuando escogemos a una pareja para compartir con él o ella
toda la vida, en ese momento que tomamos esa decisión tan importante, SABEMOS a
lo que nos metemos. Es decir, sabemos
como es, lo que le gusta comer y lo que no, el deporte que le gusta, las
costumbres que tiene, las necesidades económicas que tiene, el plan de vida que
tiene personal y familiar, etc. ..O por lo menos hasta donde creíamos, porque nunca
acabamos de conocer a los demás… ¿sabes porqué? ¡Porque ni nosotros mismos nos
conocemos a profundidad! El vivir en armonía como pareja no implica SER lo que
el otro quiere que seamos, sino SER NOSOTROS MISMOS y que el otro nos acepte
tal y como somos. Si al tomar esa
decisión tan importante tienes esto en cuenta, tu matrimonio será estable (y
conste que no digo lindo ni maravilloso ni nada de eso) ya que no se perderá la
esencia de lo que eres, sin embargo si al tomar la decisión la tomas diciendo: “me
casaré porque no me queda de otra estoy embarazada (o la embaracé)”, o “no me
queda de otra, este matrimonio me dará estabilidad económica”, o “tenemos ya 10
años de novios, supongo que esto sigue” o “si no le digo que sí, se irá con
otra(o)” etc… En fin este matrimonio
estará condenado al fracaso aún antes de haberse consumado. Piensen bien lo que quieren y lo que en
verdad esperan de la vida…quieren paz y armonía en el hogar? O desean peleas y
competencias personales en lugar de trabajo en equipo?
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